Por: Mario Luis Pennella
Cuando el final se aproxima a los individuos que gobiernan en una autarquía como poder absoluto, comienzan a tener la flaqueza de la derrota, la cual los hace demostrar su desesperación y hasta que punto pueden llegar sin avergonzarse de violar conceptos morales y por el contrario ponerlos a disposición de su arrogancia y soberbia, ante todo el pueblo.
Esa desesperanza de perder poder, los motiva e incita aún en los momentos que arrecia la epidemia del dengue, en que en el preciso instante que una senadora del mismo frente del gobierno, inspira un proyecto de emergencia nacional, y que la oposición acompañaba totalamente en mayoría, una llamada telefónica de la Sra. Presidente o en su defecto por orden de su esposo, el ex presidente de la nación, la detiene a instancia del jefe del bloque de senadores. Un bochorno sin nombre de la peor estirpe moral, ya que priva de atenuar la epidemia en base a una inmoralidad hacia el prójimo que no va asistir.
El gobierno está más en crisis que la propia crisis mundial, ya que la terrible no gestión de gobierno se hace cuasi extrema, la nación vive instantes caóticos de inseguridad, de pobreza extrema, de mentiras que denotan la más pésima moral política, y sobre todo el aislamiento crediticio que soporta en pos de las elecciones que pretende, como en otros momentos, echando los dineros de la nación como si fueran suyos propios según la preferencia estine la conveniencia.
Tomando los dineros de los jubilados para tapar cuestiones que luego tendrán mas consecuencias funestas para la clase pasiva, aún mas de la indignidad en que se sumergen ante los salarios miserables, y en la violación de la Constitución de la Nación Argentina a saber del art.14 bis de la misma y del 82% que predican igual trabajo igual salario, por 82% de la remuneración que percibe el activo en ralación con igual cargo con que se jubilara el pasivo.
Ante todas esta irregularidades y esta puesta en escena de elegir a individuos que se postulan en cargos para los cuales de ser elegidos no asumirían, por cuanto volverían a sus puestos actuales, muestran la inmoralidad absoluta, donde el votante no sabrá a quien elige, esa anticonstitucional moral, pone de manifiesto a quienes gobiernan la Argentina, denostada ante el mundo con esta ignominia que carece de todo debate en los sentidos éticos, patriotas y honestos.
El pueblo argentino tendrá que saber no solo reflexionar ante el voto que emitirá, sino que deberá salvarguardarlo ante la posibilidad del FRAUDE latente, el cual sigue presente no solo por votar con la vetusta y antigua ley del siglo XIX, (ley Saenz Peña) sino ante el triste episodio vivido en la Pcia. de Buenos Aires en la votación en que la Sra. Presidente de la Nación Argentina fuera elegida, ya que la boleta opositora que la llevaría al ballotage habían desaparecido de los cuartos oscuros. Pero como coralario y para satisfacer mas esta inmoralidad el ex presidente quiere ser elegido como diputado de la pcia. de Buenos Aires, no estando en el padrón. ¿Los jueces respectivos ante la denuncia, que harán?
Sabe el pueblo todo que el ex presidente, está y ha sido gobernador de la misma afincado desde muchos años ya en la pcia. de Santa Cruz.
En la era del peronismo han gobernado individuos que han hecho de Argentina una nación retrógada, ante períodos de corrupción , fué antes el menemismo hoy superado por el kirchnerismo.
LA CIUDADANÍA ARGENTINA TIENE LA PALABRA.
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