Por: Mario Luis Pennella
Este gobierno es el asérrimo enemigo de la justicia social, donde explota en los discuros las mentiras constantes, y simboliza en el dinero de los jubilados su autarquía, del cual se sirve para hacer propuestas falaces, cuando en la realidad los dineros son utilizados para fines en detrimento de los jubilados y de la nación, violando la constitución de la Nación, arbitra los depósitos de la nación con total discrecionalidad y antojo, en desmedro de los que menos tienen, en políticas que solamente buscan el poder por el poder, en un maquiavélico plan, donde la falacia es la constante sistemática de sus caprichos y del devenir de una mendacidad de erigirse progresista, si lo es, en la ineficacia a através de su corrupción, donde cada día esta progresa más y más.
Los fondos de los jubilados, tienen otros destinos, $92.000.000.000. (noventa y dos mil millones de pesos) del ANSES, están prestados con toda discrecionalidad.
Aunque el Gobierno insiste en que no podrá pagar el 82% móvil para las jubilaciones, ayer volvió a echar mano a recursos jubilatorios para financiar sus gastos. Según se publicó en el Boletín Oficial, la ANSeS le prestó al Tesoro Nacional unos 1.200 millones de pesos a través de la colocación de títulos públicos (Letras).
La medida se concretó con los recursos del Fondo de Garantía de Sustentabilidad (FGS) de la ANSeS que maneja $ 149.286 millones. Ese fondo se nutrió de los aportes de los afiliados a las AFJP y luego fue traspasado al Estado cuando se eliminó el sistema jubilatorio de reparto.
Esta decisión se conoció ayer, pocas horas antes que la Comisión de Previsión de la Cámara de Diputados comenzara a tratar el proyecto que fija la jubilación mínima en el 82% del sueldo mínimo.
Se trata de dos préstamos, por los cuales se entregaron Letras del Tesoro. El primero, con vencimiento el 15 de septiembre de 2010, es por $ 730.000.000 al 11,01 % de interés anual. Y otro con vencimiento el próximo 22 de septiembre por US$ 125.000.000 al 4,5% de interés nominal anual.
En ambos casos, la tasa de interés que le pagará el Tesoro Nacional al Fondo de Garantía es muy baja, ya que apenas cubre la mitad de la inflación real en un año.
Esta no es la primera vez que se hace una operación como esta. Y el sistema jubilatorio tampoco es el único organismo al que el Tesoro recurre colocando Letras para financiar el pago de los vencimientos de la deuda pública. Por ejemplo, en lo que va de 2010, el Tesoro tiene colocadas Letras por $ 700 millones en el PAMI, $ 160 millones en la Lotería y unos $ 1.400 millones en el Fondo Fiduciario de Reconstrucción de Empresas. Ahora se suman $ 1.230 millones del sistema previsional.
Con estos dos préstamos, el Fondo de Garantía tiene colocados en papeles del Estado -entre bonos y Letras- más de $ 92.000 millones, a los valores de hoy. Esto representa el 61,4% del total de sus inversiones.
Los otros casi $ 60.000 millones están invertidos en acciones, obligaciones negociables, plazos fijos y préstamos a empresas privadas.
Una parte de estos Fondos estaban en manos de las AFJP y fueron traspasados a la ANSeS en dos etapas. Primero cuando se abrió la posibilidad de volver al régimen público de jubilación. Y, luego, cuando se disolvió el régimen privado, a fines de 2008. Desde entonces, el valor de los recursos del Fondo creció por la suba del precio de los bonos y de las acciones; pero no varió fundamentalmente el destino de sus inversiones.
A fines de 2008, el 59,5% del Fondo estaba colocado en papeles del Estado, contra el 61,4% actual. Entonces había más colocaciones en plazos fijos, mientras que ahora aumentó en 5 puntos la participación de los llamados “préstamos productivos” a empresas estatales o privadas.
El objetivo inicial del Fondo era garantizar el pago de las jubilaciones y pensiones y también contribuir al financiamiento del Estado y de la actividad privada.
Por eso, cuando se creó, el Fondo tenía un tope equivalente a un año de jubilaciones y pensiones porque, se sostuvo, el excedente debía servir para mejorar el pago de las prestaciones. Pero luego ese límite fue derogado porque la prioridad pasó a ser financiar los gastos del Estado y al sector privado.
Actualmente la ANSeS paga las jubilaciones y pensiones con la plata que recauda por aportes y contribuciones y por los impuestos que van a la Seguridad Social. Así, le queda un excedente, que el año pasado rondó los 7.000 millones de pesos.
El titular del bloque de senadores de la UCR, Gerardo Morales, defendió hoy el proyecto que impulsa la oposición para llevar por ley la jubilación mínima al 82% del salario mínimo y afirmó que los fondos de la ANSeS alcanzan sobradamente para satisfacer esa demanda. Por el contrario, se quejó por el uso que le da el Gobierno a ese dinero e ironizó: "La ANSeS se ha convertido en la cajita feliz".
Esta es la realidad, la cual no es fuente de mendacidad, como la que expresan el ministro Boudou, el ex presidente Néstor Kirchner y los acólitos sseguidores del gobierno.
Este gobierno como han hecho otros anteriores se han servido de los dineros de los jubilados, para sus fines de conveniencia política, siempre en desmedro de los jubilados, hoy se sigue con este sistema de crueldad hacia los viejos ex trabajadores, que trabajaron por más de 30 años (haciendo patria) y aportando religiosamente durante todo el período laboral, siempre los han tomado como rehenes débiles, aprovechándose de sus edades, y donde vemos como mueren estos sin acceder a sus dineros del salario digno y los reajustes adeudados, ya que en juicios puestos a demoras de 5 o más años y vuelta a apelar, nunca consiguuen regularizar sus haberes, viviendo situaciones terribles, como no poder alimentarse correctamente o no poder comprar los remedios necesarios, para mitigar los achaques de su vejez, esto señores del gobierno de la nación Argentina, es una canallada, ya que ver morir a esta ancianidad argentina de ex trabajadores, es un crimen de lesa humanidad.
Es un crimen de lesa humanidad por cuanto no hacen nada, creer en su corrupta política que un jubilado pueda vivir con $ 895 (ochocientos noventa y cinco pesos) o aquellos que están en los juicios y han aportado durante los 30 años, con $ 1.000 o algo más, es mas que vergonzante, es realmente una canallada sin retórica.
28.6.10
SEÑORA PESIDENTA. . . LEA
POR: MARIO LUIS PENNELLA
Vale la pena leerlo...
DISCURSO DE LA DIPUTADA LIDIA "PINKY" SATRAGNO EN LA SESION ESPECIAL POR EL BICENTENARIO
Creo que, en vez de rendirles un homenaje, deberíamos hacerles un desagravio a los hombres de Mayo.
Es cierto que, hace 200 años, había en la sociedad –como hoy y como siempre—porcentajes de mediocridad, mezquindades y enfrentamientos.
Sin embargo, al lado de esas fallas, nuestros antepasados derrocharon genio, generosidad y espíritu solidario.
Aquellos patriotas tenían visión, tenían objetivos y tenían capacidad de lucha:
- Contagiaban su patriotismo a la sociedad.
- La invitaban a una gesta.
Hoy, los argentinos no nos sentimos convocados a ningún esfuerzo común. No creemos en la unidad entre gobernantes y gobernados. No pensamos que nuestro bienestar está en manos de quienes conducen la Nación.
Quiero referirme a un hecho simbólico, no sin antes advertir que amo el fútbol. Soy “cuervo” y vibro con la selección.
Lo que me estremece es que hoy, en el Bicentenario de la patria, la esperanza de ganar en Sudáfrica sea el ÚNICO factor de unidad nacional.
Hace unos días, en Israel, Charly García interpretó su versión del Himno Nacional ante millares de argentinos.
- Al finalizar, no hubo vivas a la patria lejana;
- La multitud comenzó a corear “Volveremos, volveremos”, como si sólo la moviera la posibilidad de ser “campeones, como en el 86” .
Lo peor es que ese gesto sugería que, en caso de perder la selección (Dios y Messi no lo permitan) nos quedaríamos sin ningún factor de unión.
Creo que todos debemos reflexionar sobre el papel que cumplimos en esta sociedad.
Los que no somos Maradona, ni Mascherano, ni el Pipita Higuaín, ¿qué hacemos para que nuestros compatriotas se sientan orgullosos de ser argentinos?
* ¿De qué se ocupa esta Cámara de Diputados?
* ¿Cuáles son los proyectos que trata y cuáles son los que no trata?
* ¿Cómo van a cambiar, nuestras decisiones, la vida de la gente?
*¿En qué ayudaremos a que la Argentina se desarrolle, económica y
socialmente?
* ¿Qué aporte haremos a nuestra alicaída educación?
* ¿Vamos a quedarnos cruzados de brazos mientras la inseguridad se
lleva cientos de vidas por semana?
* ¿Seguiremos tolerando la desigualdad social obscena?
A mí me indigna cuando se me dice que “es difícil” hacer todo lo que deberíamos hacer. Que hay “muchos obstáculos”. Que los medios de comunicación no ayudan.
* ¿Era fácil construir, partiendo de cero, la armazón jurídica de un nuevo Estado, formar una burocracia, establecer un sistema judicial y crear un sistema monetario?
* ¿Era fácil enfrentar a los fogueados militares realistas?
* ¿Era fácil improvisar ejércitos con desertores, libertos y presos?
* ¿Era fácil, para un abogado como Manuel Belgrano, ganar las dos bata-
llas más trascendentes de nuestra historia patria, Salta y Tucumán?
* ¿Era fácil cruzar los Andes para liberar Chile y luego ir por mar a liberar el
Perú?
Los obstáculos que hoy tenemos son ínfimos al lado de los que debieron superar los próceres. No busquemos excusas. No convirtamos el Bicentenario en un show frívolo e intrascendente.
Como ferviente belgraniana que soy, pido que oigamos lo que, tantos años atrás, quiso enseñarnos Belgrano:
“Este país, que al parecer no reflexiona ni tiene conocimientos económicos, será un país desgraciado, si esteriliza la feracidad de sus tierras y desatiende su industria. Pero eso no es todo. Sin educación, nunca seremos más que lo que desgraciadamente somos”.
También dijo: “Me hierve la sangre, al observar tanto obstáculo, tantas dificultades que se vencerían rápidamente si hubiera un poco de interés por la patria."
Belgrano nos enseñó qué debíamos hacer !
Pero también nos enseñó cómo debíamos hacerlo !
Dijo que era necesario “trabajar por la patria poniendo voluntad, no incertidumbre; método, no desorden; disciplina, no caos; constancia no improvisación; firmeza, no blandura; magnanimidad, no condescendencia." El lo cumplió.
Recomendó, además, que los gobernantes no buscaran “glorias ni honores”, y que no respondieran a “intereses” distintos de los intereses de la Patria.
El día que todo esto sea verdad en la Argentina, podremos festejar sin hipocresías.
Ojalá sea el 9 de julio de 2010.
CIUDAD AUTÓNOMA DE BUENOS AIRES, 28 DE JUNIO DE 2010.
_______________________________________________________
Vale la pena leerlo...
DISCURSO DE LA DIPUTADA LIDIA "PINKY" SATRAGNO EN LA SESION ESPECIAL POR EL BICENTENARIO
Creo que, en vez de rendirles un homenaje, deberíamos hacerles un desagravio a los hombres de Mayo.
Es cierto que, hace 200 años, había en la sociedad –como hoy y como siempre—porcentajes de mediocridad, mezquindades y enfrentamientos.
Sin embargo, al lado de esas fallas, nuestros antepasados derrocharon genio, generosidad y espíritu solidario.
Aquellos patriotas tenían visión, tenían objetivos y tenían capacidad de lucha:
- Contagiaban su patriotismo a la sociedad.
- La invitaban a una gesta.
Hoy, los argentinos no nos sentimos convocados a ningún esfuerzo común. No creemos en la unidad entre gobernantes y gobernados. No pensamos que nuestro bienestar está en manos de quienes conducen la Nación.
Quiero referirme a un hecho simbólico, no sin antes advertir que amo el fútbol. Soy “cuervo” y vibro con la selección.
Lo que me estremece es que hoy, en el Bicentenario de la patria, la esperanza de ganar en Sudáfrica sea el ÚNICO factor de unidad nacional.
Hace unos días, en Israel, Charly García interpretó su versión del Himno Nacional ante millares de argentinos.
- Al finalizar, no hubo vivas a la patria lejana;
- La multitud comenzó a corear “Volveremos, volveremos”, como si sólo la moviera la posibilidad de ser “campeones, como en el 86” .
Lo peor es que ese gesto sugería que, en caso de perder la selección (Dios y Messi no lo permitan) nos quedaríamos sin ningún factor de unión.
Creo que todos debemos reflexionar sobre el papel que cumplimos en esta sociedad.
Los que no somos Maradona, ni Mascherano, ni el Pipita Higuaín, ¿qué hacemos para que nuestros compatriotas se sientan orgullosos de ser argentinos?
* ¿De qué se ocupa esta Cámara de Diputados?
* ¿Cuáles son los proyectos que trata y cuáles son los que no trata?
* ¿Cómo van a cambiar, nuestras decisiones, la vida de la gente?
*¿En qué ayudaremos a que la Argentina se desarrolle, económica y
socialmente?
* ¿Qué aporte haremos a nuestra alicaída educación?
* ¿Vamos a quedarnos cruzados de brazos mientras la inseguridad se
lleva cientos de vidas por semana?
* ¿Seguiremos tolerando la desigualdad social obscena?
A mí me indigna cuando se me dice que “es difícil” hacer todo lo que deberíamos hacer. Que hay “muchos obstáculos”. Que los medios de comunicación no ayudan.
* ¿Era fácil construir, partiendo de cero, la armazón jurídica de un nuevo Estado, formar una burocracia, establecer un sistema judicial y crear un sistema monetario?
* ¿Era fácil enfrentar a los fogueados militares realistas?
* ¿Era fácil improvisar ejércitos con desertores, libertos y presos?
* ¿Era fácil, para un abogado como Manuel Belgrano, ganar las dos bata-
llas más trascendentes de nuestra historia patria, Salta y Tucumán?
* ¿Era fácil cruzar los Andes para liberar Chile y luego ir por mar a liberar el
Perú?
Los obstáculos que hoy tenemos son ínfimos al lado de los que debieron superar los próceres. No busquemos excusas. No convirtamos el Bicentenario en un show frívolo e intrascendente.
Como ferviente belgraniana que soy, pido que oigamos lo que, tantos años atrás, quiso enseñarnos Belgrano:
“Este país, que al parecer no reflexiona ni tiene conocimientos económicos, será un país desgraciado, si esteriliza la feracidad de sus tierras y desatiende su industria. Pero eso no es todo. Sin educación, nunca seremos más que lo que desgraciadamente somos”.
También dijo: “Me hierve la sangre, al observar tanto obstáculo, tantas dificultades que se vencerían rápidamente si hubiera un poco de interés por la patria."
Belgrano nos enseñó qué debíamos hacer !
Pero también nos enseñó cómo debíamos hacerlo !
Dijo que era necesario “trabajar por la patria poniendo voluntad, no incertidumbre; método, no desorden; disciplina, no caos; constancia no improvisación; firmeza, no blandura; magnanimidad, no condescendencia." El lo cumplió.
Recomendó, además, que los gobernantes no buscaran “glorias ni honores”, y que no respondieran a “intereses” distintos de los intereses de la Patria.
El día que todo esto sea verdad en la Argentina, podremos festejar sin hipocresías.
Ojalá sea el 9 de julio de 2010.
CIUDAD AUTÓNOMA DE BUENOS AIRES, 28 DE JUNIO DE 2010.
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18.6.10
¿OTRA VEZ LOS MISMO?
POR: Mario Luis Pennella
El campeonato mundial de fútbol, está manteniendo un corto impás a este momento en que los políticos, volverán a debatir para conformar una estrategia y toda la parafenalia que envolverá a las elecciones presidenciales del próximo año.
Es indudable que las mañas de las últimas décadas no ha pasado para nada, de tal manera que nuevamente se está viendo como se juntan los mismos individuos que siempre están al pie del cañón,y estos son en su mayoría aquellos que de una u otra forma han producido, los graves problemas que ha tenido el pueblo argentino, mediante sus acciones nefastas en su andar en funciones dentro del espectro político.
Estos políticos identificados por todo el pueblo y que no necesitan presentación alguna, se encuentran en los dos partidos mayoritarios de la Argentina, el PJ y la UCR (Partido Justicialista, Unión Cívica Radical) y algunos otros desparramados en partidos de poco interés en la población.
Cabe destacar que la Argentina es la nación con una cantidad de partidos políticos espantosa, que en las elecciones nunca llegan a consolidar siquiera una minoría sustentable.
Si es asombrosamente notorio como se juntan aquellos que no son personajes no solo creíbles sino sindicados por el pueblo como (pianta votos) o peor aún corruptos útiles para algunos partidos, los cuales ya vienen con la intención política de utilizarlos en sus mentiras que luego paradojas de los discursos, utilizarán en estrategias que le dolerán al pueblo por doquier.
Vemos ya una posición tomada justamente en ambos partidos, lo que el pueblo espera en algunas nuevas formacions políticas que el pueblo tiene en ellas cifradas esperanzas, que estas no se contaminen con ellos, por cuanto sería muy penoso que la Argentina siga padeciendo el retraso, en una retrogadación más, lo cual sería una razón tan ilógica como destructiva para un país que tiene todo para el momento actual que se avecina, y pegar el gran salto político al mundo entero, ya que de seguir con principios de honestidad y dedicación hacia erradicar la pobreza, con una propuesta de justicia social aplicable, la cual no es una utopía, sino una simple adecuación de estrategias políticas programadas, con la inversión hacia el desarrollo del trabajo y terminar con la la desidia inmersa en un estado de clientelismo político, el cual provocado con dineros provenientes del estado, provocan justamente más pobreza y más corrupción, donde sacan beneficios punteros políticos y en el control general de ese subsidio espurio, la infame política que adoptan estos energúmenos, que prometen riquezas y promulgan en su mendacidad, cuando ejercen los cargos, la vil rapiña de la nación, despilfarrando los fondos en sutilezas incoherentes y robando los dineros de los viejos trabajadores, hoy jubilados y de cuanto tesoro con dinero se encuentre disponible.
Las alianzas con honestos políticos pueden ser el punto, siempre y cuando estas se encuentren depuradas de todos aquellos individuos, y logren una punible y creíble disertación de sus acciones futuras, para el logro del cometido final, con un programa de gobierno realizable y ensamblado en destruír el poder de pobreza y abarcar la política del trabajo, la educación, la salud erradicando para siempre el hambre, en una honestidad de verdad para hacer la realidad de una nación que sale de este estancamiento corrupto hacia el porvenir saludable de futuro y del progreso.
Termino el escrito lamentando el discurso de la fecha de la Sra. Presidente, donde nuevamente la mentira persiste sobre la verdad; sostuvo que el periodismo fué culpable de la problemática suscitada por los llamados "barras bravas", en Sudáfrica, cuando los sucesos de sus deportaciones fueron otros y a su vez, estos llegaron allí amparados por la política de gobierno, a sabiendas de quienes eran, y como salieron del país siendo individuos no aptos para tener los correspondientes pasaportes, por los delitos pendientes que tenían en la Argentina.
Si de las mentiras que se expresan hoy queremos cambiarlas mañana por razonamientos diferentes, seguimos inspirando la vieja versión política, de prometer bonanzas y justicia social, que luego cuando llegan al poder inmediatamente se esfuman en una falaz estrategia política del nuevo discurso que siembran la verdadera realidad de lo que significa: mas pobreza más poder.Las controvesias son el punto de la verdad de lo que se quiere, por ende el pueblo debe definirlas cuando exprese con su voto lo que quiere: verdad o mentira.
Ciudad Autónoma de Buenos Aires, 17 de junio de 2010.
El campeonato mundial de fútbol, está manteniendo un corto impás a este momento en que los políticos, volverán a debatir para conformar una estrategia y toda la parafenalia que envolverá a las elecciones presidenciales del próximo año.
Es indudable que las mañas de las últimas décadas no ha pasado para nada, de tal manera que nuevamente se está viendo como se juntan los mismos individuos que siempre están al pie del cañón,y estos son en su mayoría aquellos que de una u otra forma han producido, los graves problemas que ha tenido el pueblo argentino, mediante sus acciones nefastas en su andar en funciones dentro del espectro político.
Estos políticos identificados por todo el pueblo y que no necesitan presentación alguna, se encuentran en los dos partidos mayoritarios de la Argentina, el PJ y la UCR (Partido Justicialista, Unión Cívica Radical) y algunos otros desparramados en partidos de poco interés en la población.
Cabe destacar que la Argentina es la nación con una cantidad de partidos políticos espantosa, que en las elecciones nunca llegan a consolidar siquiera una minoría sustentable.
Si es asombrosamente notorio como se juntan aquellos que no son personajes no solo creíbles sino sindicados por el pueblo como (pianta votos) o peor aún corruptos útiles para algunos partidos, los cuales ya vienen con la intención política de utilizarlos en sus mentiras que luego paradojas de los discursos, utilizarán en estrategias que le dolerán al pueblo por doquier.
Vemos ya una posición tomada justamente en ambos partidos, lo que el pueblo espera en algunas nuevas formacions políticas que el pueblo tiene en ellas cifradas esperanzas, que estas no se contaminen con ellos, por cuanto sería muy penoso que la Argentina siga padeciendo el retraso, en una retrogadación más, lo cual sería una razón tan ilógica como destructiva para un país que tiene todo para el momento actual que se avecina, y pegar el gran salto político al mundo entero, ya que de seguir con principios de honestidad y dedicación hacia erradicar la pobreza, con una propuesta de justicia social aplicable, la cual no es una utopía, sino una simple adecuación de estrategias políticas programadas, con la inversión hacia el desarrollo del trabajo y terminar con la la desidia inmersa en un estado de clientelismo político, el cual provocado con dineros provenientes del estado, provocan justamente más pobreza y más corrupción, donde sacan beneficios punteros políticos y en el control general de ese subsidio espurio, la infame política que adoptan estos energúmenos, que prometen riquezas y promulgan en su mendacidad, cuando ejercen los cargos, la vil rapiña de la nación, despilfarrando los fondos en sutilezas incoherentes y robando los dineros de los viejos trabajadores, hoy jubilados y de cuanto tesoro con dinero se encuentre disponible.
Las alianzas con honestos políticos pueden ser el punto, siempre y cuando estas se encuentren depuradas de todos aquellos individuos, y logren una punible y creíble disertación de sus acciones futuras, para el logro del cometido final, con un programa de gobierno realizable y ensamblado en destruír el poder de pobreza y abarcar la política del trabajo, la educación, la salud erradicando para siempre el hambre, en una honestidad de verdad para hacer la realidad de una nación que sale de este estancamiento corrupto hacia el porvenir saludable de futuro y del progreso.
Termino el escrito lamentando el discurso de la fecha de la Sra. Presidente, donde nuevamente la mentira persiste sobre la verdad; sostuvo que el periodismo fué culpable de la problemática suscitada por los llamados "barras bravas", en Sudáfrica, cuando los sucesos de sus deportaciones fueron otros y a su vez, estos llegaron allí amparados por la política de gobierno, a sabiendas de quienes eran, y como salieron del país siendo individuos no aptos para tener los correspondientes pasaportes, por los delitos pendientes que tenían en la Argentina.
Si de las mentiras que se expresan hoy queremos cambiarlas mañana por razonamientos diferentes, seguimos inspirando la vieja versión política, de prometer bonanzas y justicia social, que luego cuando llegan al poder inmediatamente se esfuman en una falaz estrategia política del nuevo discurso que siembran la verdadera realidad de lo que significa: mas pobreza más poder.Las controvesias son el punto de la verdad de lo que se quiere, por ende el pueblo debe definirlas cuando exprese con su voto lo que quiere: verdad o mentira.
Ciudad Autónoma de Buenos Aires, 17 de junio de 2010.
14.6.10
LA ESCLAVITUD AL REALISMO DE LAS COSAS
LA ESCAVITUD AL REALISMO DE LAS COSAS.
Es de un libro del año 1983, de Carlos Garcìa Martínez.-
Elegir es discernir. Discernir es comprender. Comprender es dominar las leyes que rigen las cosas. Aquellos que tienen la misión de transformar la realidad deben entonces enfrentarse a la necesidad de elegir para poder realizar sus aspiraciones. Pocos hechos demuestran acabadamente el debilitamiento de la voluntad y lucidez de los dirigentes de una nación, que su intento por lograr simultáneamente metas que son contradictorias entre sí.
Sería ciertamente mucho más grato, cómodo y fácil si por un arte milagroso todo lo que deseamos pudiera lograrse sin tener que pagar por ello ningún sacrificio.
Para desgracia o para ventura nuestra, la vida no tiene piedad de los sentimientos humanos y sus leyes no respetan los deseos de los hombres. El que quiere algo, debe estar dispuesto a pagar el esfuerzo requerido, esfuerzo que siempre implica renunciar a otra finalidad. Cuando así no sucede, es que el espíritu de los dirigentes no ha llegado a aquel grado de evolución que le permita distinguir tajantemente entre el mundo de la fantasía y el mundo de los hechos tal cual son. Este es un pecado tan grave para el que tiene a su cargo los difíciles trabajos del gobierno, que ningún Estado puede salir adelante con una dirección tan incompetente. Cuando se manejan realidades y se tienen en la cabeza abstracciones, el resultado no puede ser otro que la catástrofe. Si se ve claro la dolorosa alternativa que plantea toda elección, pero se actúa como si no se la viera, estamos en el terreno resbaladizo de la demagogia, cuya naturaleza esencial es negarse de antemano a un planteamiento realista de los problemas. Un pueblo cuyos gobernantes están entregados a la demagogia está hipotecando continuamente su futuro, vive del capital, y no de las rentas, destruye sistemáticamente los pilares espirituales y físicos que hacen a una sociedad sana y pujante. El desorden, la anarquía y el hundimiento de la nación son los frutos naturales de esta política propia de los tiempos decadentes.
Muy distinto es lo que ocurre en los tiempos de ascenso. La pasión por hacer, por transformar, por crear, por borrar rápidamente lo que hiere la vista y el alma es tan fuerte, que se buscan frenéticamente los obstáculos para vencerlos. Un respeto casi religioso por los hechos domina los espíritus, aflorando las decisiones que llevan consigo un pulso firme, una definida elección, una mente que sabe lo que quiere. Las épocas históricas de intensa creación han odiado y amado intensamente. Establecen preferencias y rechazos nítidos y repudian abiertamente todo tipo de eclecticismo. El sentimiento agudísimo de que el tiempo es escaso y la tarea a realizar inmensa, es tan violento y absorbente que las consideraciones mezquinas no pueden siquiera asomar su deprimente rostro.
Aparece un rasgo clave, que siempre emerge como cima eminente en la política llamada a tener resonancia histórica. Es la íntima esclavitud al realismo de las cosas. No interesa lo que se diga o lo que se profese, cuando llega el momento de la acción son las cosas al cual son las que mandan con su dureza implacable.
Los gobernantes pueden seguirlas o no, pueden respetarlas o pretender vanamente que se acomoden a sus designios. Si hace lo primero demuestra con los hechos su vocación de grandeza. Si no lo hace, demostrará igualmente que estará por debajo de las exigencias de la hora. El desprecio por toda ideología,. Cualquiera sea ella, es el faro brillante que ilumina el oscuro escenario donde se debaten las fuerzas que llevan al retroceso o al avance. Cuando se comprende realmente el inmenso poder que se desprende de aplicar remedios realistas a los conflictos históricos, no resulta sorprendente que cuando una nación ha logrado algo perdurable siempre ha tenido que apelar a soluciones drásticas que poco tienen que ver con el humanitarismo o la propaganda ideológica. El instinto de supervivencia, la voluntad de afirmación del propio ser, se aquilatan en las duras pruebas a las que el destino somete a una nación.-
Estas verdades no son una ficción ni tampoco una sensación virtual de un pueblo, sino la única realidad de nuestra Argentina de hoy, la cual si bien fuera escrito en 1983 inicio de nuestra era democrática, nos refleja que no avanzamos sino por el contrario retrocedemos.
Mario Luis Pennella
Ciudad Autónoma de Buenos Aires, 14 de junio de 2010.
Es de un libro del año 1983, de Carlos Garcìa Martínez.-
Elegir es discernir. Discernir es comprender. Comprender es dominar las leyes que rigen las cosas. Aquellos que tienen la misión de transformar la realidad deben entonces enfrentarse a la necesidad de elegir para poder realizar sus aspiraciones. Pocos hechos demuestran acabadamente el debilitamiento de la voluntad y lucidez de los dirigentes de una nación, que su intento por lograr simultáneamente metas que son contradictorias entre sí.
Sería ciertamente mucho más grato, cómodo y fácil si por un arte milagroso todo lo que deseamos pudiera lograrse sin tener que pagar por ello ningún sacrificio.
Para desgracia o para ventura nuestra, la vida no tiene piedad de los sentimientos humanos y sus leyes no respetan los deseos de los hombres. El que quiere algo, debe estar dispuesto a pagar el esfuerzo requerido, esfuerzo que siempre implica renunciar a otra finalidad. Cuando así no sucede, es que el espíritu de los dirigentes no ha llegado a aquel grado de evolución que le permita distinguir tajantemente entre el mundo de la fantasía y el mundo de los hechos tal cual son. Este es un pecado tan grave para el que tiene a su cargo los difíciles trabajos del gobierno, que ningún Estado puede salir adelante con una dirección tan incompetente. Cuando se manejan realidades y se tienen en la cabeza abstracciones, el resultado no puede ser otro que la catástrofe. Si se ve claro la dolorosa alternativa que plantea toda elección, pero se actúa como si no se la viera, estamos en el terreno resbaladizo de la demagogia, cuya naturaleza esencial es negarse de antemano a un planteamiento realista de los problemas. Un pueblo cuyos gobernantes están entregados a la demagogia está hipotecando continuamente su futuro, vive del capital, y no de las rentas, destruye sistemáticamente los pilares espirituales y físicos que hacen a una sociedad sana y pujante. El desorden, la anarquía y el hundimiento de la nación son los frutos naturales de esta política propia de los tiempos decadentes.
Muy distinto es lo que ocurre en los tiempos de ascenso. La pasión por hacer, por transformar, por crear, por borrar rápidamente lo que hiere la vista y el alma es tan fuerte, que se buscan frenéticamente los obstáculos para vencerlos. Un respeto casi religioso por los hechos domina los espíritus, aflorando las decisiones que llevan consigo un pulso firme, una definida elección, una mente que sabe lo que quiere. Las épocas históricas de intensa creación han odiado y amado intensamente. Establecen preferencias y rechazos nítidos y repudian abiertamente todo tipo de eclecticismo. El sentimiento agudísimo de que el tiempo es escaso y la tarea a realizar inmensa, es tan violento y absorbente que las consideraciones mezquinas no pueden siquiera asomar su deprimente rostro.
Aparece un rasgo clave, que siempre emerge como cima eminente en la política llamada a tener resonancia histórica. Es la íntima esclavitud al realismo de las cosas. No interesa lo que se diga o lo que se profese, cuando llega el momento de la acción son las cosas al cual son las que mandan con su dureza implacable.
Los gobernantes pueden seguirlas o no, pueden respetarlas o pretender vanamente que se acomoden a sus designios. Si hace lo primero demuestra con los hechos su vocación de grandeza. Si no lo hace, demostrará igualmente que estará por debajo de las exigencias de la hora. El desprecio por toda ideología,. Cualquiera sea ella, es el faro brillante que ilumina el oscuro escenario donde se debaten las fuerzas que llevan al retroceso o al avance. Cuando se comprende realmente el inmenso poder que se desprende de aplicar remedios realistas a los conflictos históricos, no resulta sorprendente que cuando una nación ha logrado algo perdurable siempre ha tenido que apelar a soluciones drásticas que poco tienen que ver con el humanitarismo o la propaganda ideológica. El instinto de supervivencia, la voluntad de afirmación del propio ser, se aquilatan en las duras pruebas a las que el destino somete a una nación.-
Estas verdades no son una ficción ni tampoco una sensación virtual de un pueblo, sino la única realidad de nuestra Argentina de hoy, la cual si bien fuera escrito en 1983 inicio de nuestra era democrática, nos refleja que no avanzamos sino por el contrario retrocedemos.
Mario Luis Pennella
Ciudad Autónoma de Buenos Aires, 14 de junio de 2010.
6.6.10
EL JUBILADO ARGENTINO
ESPERANZA DE UN JUBILADO PARA PERCIBIR EL SALARIO DIGNO
Por: Mario Luis Pennella
La esperanza del jubilado es nada más ni nada menos en la Argentina, tener la justicia social que le acuerda el artículo 14 bis de la Constitución de la Nación Argentina, pero el gobierno que actualmente gobierna, el cual tiene cautivo el capital aportado en el ANSES, (organismo estatal que administra los fondos de los jubilados y pensionados) a los efectos de emplearlos donde ellos crean conveniente y discrecionalmente invertir, por lo tanto ante los gastos de subsidios arbitrarios, ante los gastos del clientelismo político o los exagerados y elevados gastos públicos, que deteriora la economía y produce la inflación creciente, nuestro gobierno deja de lado a los hoy ex trabajadores, viejos ya, para que los mismos requieran de un letrado que defienda sus derechos constitucionales, pero también le es trabada su gestión jurídica, ya que los "plancha" o "cajonean" por largos períodos de tiempo que solo algunos en su debido tiempo, logran satisfacer en 5 años sin haber caído en enfermedades o muerto, puedan percibirlos y lograr un poco de salud económica y armonía en su hogar pudiendo hasta satisfacer comprar no solo los alimentos sino los remedios, que muchas veces requieren sus dolencias y que en algunos casos, los mismos son de considerable valor, no solo específico sino en el precio que cuestan y en que no se consigue en las obras sociales, hoy algunas comprometidas con la corrupción de sus dirigentes, que la han puesto en delicada situación no solo financiera sino estructuralmente, habiendo perdido los adelantos conseguidos cuando los hoy ex trabajadores forjaron con sus aportes obras sociales ejemplares hoy destruidas económicamente, y en este presente estas obras sociales se encuentran en una miserable situación.
La dirigencia política argentina no ha tenido en cuenta en estos más de 26 años de democracia, de traerles a los ex trabajadores hoy jubilados, justicia social, sino por el contrario han denigrado la acción social misma del derecho adquirido y propiciado la desnaturalización del concepto solidario, trabajador activo trabajador pasivo, el cual está implícito en el artículo 14 bis de la Constitución de la Nación Argentina, 82% móvil, igualdad de salario para un mismo trabajo, bienestar luego de acogerse a la jubilación, garantizando el mayor sueldo de acuerdo a sus aportes, por derecho, instaurado en la jurisprudencia y consolidado como un bien de futuro en la vejez bien asistida, y concebida a través de haber trabajado por más de 30 años y aportado para tal cometido.
Es lamentable la corrupción política, que se ha apropiado de los fondos de estos jubilados, para tapar embrollos de causas ajenas, en perjuicio de estos y concebir poliquerías insostenibles en dádivas miserables y reprochables, las cuales no alcanzan en sus aumentos salariales para comprar lo mínimo indispensable de una copa de leche, valores morales trastocados por vanidades absurdas en pos de satisfacer poderes garantizados con los dineros aportados por los ex trabajadores, inmoralidad que produce dolor, ante tanta maldad hacia los ancianos, indefensos y humillados.
Para poner una síntesis, podemos preguntar si alguno de estos individuos hoy viejos jubilados pueden vivir con un salario mínimo, el cual no alcanza para los mínimos alimentos de la vida cotidiana, y no hablemos de otra cosa que obviamos por cuanto estas no se pueden considerar en un salario de 800 a 1000 pesos mensuales.
La Confederación General del Trabajo (CGT) con su hoy jefe, Hugo Moyano, habla en sus disertaciones elogiando la acción del gobierno sin verguenza, cuando debería estar criticando estas acciones hacia el derecho de los jubilados desajustados en sus salarios de miserias.
Es esta la realidad no virtual del jubilado argentino, el cual reposa en su espíritu loable y sano de haber cumplido con la patria, luego de su esfuerzo en sus más de 30 años al servicio de una dignidad de trabajador honesto y de aportes correspondientes, no de aquel que hoy se jubila con su edad y quizá como más de uno sin haber trabajado cuasi nunca, si hago la excepción para la mujer, la cual se justifica, ella es difícil que no haya trabajado en el hogar o en algún trabajo, sin que le regulen aportes, pero el hombre ha tenido desde que nace la obligación de hacerlo, no veo mal el tema de aquel que no pudo o se quedó sin trabajo, pero hay que regular hacia arriba, no bajarles el salario a la mínima a aquel que trabajó aportó y se jubiló.
En Argentina la politiquería en este caso como en otros siempre no mira hacia abajo al pueblo, solamente mira el bienestar del político, allí es donde la corrupción contamina la moral y se extiende cual metástasis cancerígena de inmoralidad.
Ciudad Autónoma de Buenos Aires, 5 de junio de 2010.
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